Introducirse por primera vez en el mundo del ciclismo es toda una experiencia. Pocos deportes tienen ese aura que nace de deportistas y etapas legendarias, por lo que la adrenalina y la sensación de libertad están aseguradas pero, si no tienes una grupeta con la que salir de inicio, tu primera salida puede parecer un poco más compleja de lo que es en realidad.

Por esta razón y porque todos hemos sido principiantes en algún momento, os traemos este post con tips para organizar tu primera salida en bicicleta. 

Planifica tu Ruta

Si estás empezando sabrás que no vas a pasar mucho tiempo sobre la bici y que no vas a pasar muchas horas sobre ella en tus primeras salidas ni vas a hacer muchos kilómetros.

Para empezar lo mejor es pensar un camino con poco tráfico y que no tenga más de 30-40 Kilómetros, de modo que la ruta sea divertida y no quieras empezar demasiado fuerte.

Si además, planificas una parada para ver a alguien o incluso tomarte algo en mitad del camino, esa primera salida será mucho más entretenida. 

Si no quieres, o no puedes planificar una parada en una cafetería o bar de carretera, al menos lleva algo de comida contigo. No solo por si has planificado mal la ingesta de energía antes de salir, si no por si te apetece disfrutar de una parada y comer cualquier cosa en el camino.

A nivel de líquidos, debes saber que al menos debes llevar contigo un bidón de agua, pero si llevas dos o al menos, uno con electrolitos, será mucho más probable que disfrutes de tu primera salida. 

Otro punto a tener en cuenta son las apps de trackeo. Estas apps no solo te servirán para buscar rutas en tu zona que se adecuen a tus necesidades, si no que además te servirán para hacer tu seguimiento desde el primer día y disfrutarás y te sorprenderás cuando al cabo de un año veas todo lo que has hecho semana a semana. 

Aprende bien como funcionan los cambios de la bicicleta

Lo primero es aprender a cambiar de velocidad, esta parte, aunque no es difícil, si puede ser un poco confusa y puede que tengas que hacer pruebas mientras miras como cambia la cadena mientras vas en marcha.

Como norma general, en terreno llano busca el plato más grande y los piñones más pequeños de tu grupo, mientras que en las subidas, lo mejor será que utilices el plato pequeño y uno de los piñones más grandes, pero lo más importante en este caso es que busques tus propias sensaciones y veas qué tipo de velocidad se adapta mejor a tus circunstancias y a las del terreno.

Lo ideal es preguntar en la tienda o buscar en internet cómo arreglar un pinchazo o cambiar una cámara. 

Además de esto, no olvides salir con una pequeña multiherramienta y una bomba de aire pequeña, ya que si llega el caso de necesitarlas y has salido en solitario, lo más probable es que tengas que volver a casa caminando.

Volviendo a los neumáticos, asegúrate antes de salir, de que tus ruedas tienen presión y de que esta es la adecuada. Puedes encontrar los rangos de presión recomendados en el lateral de tu cubierta en la mayoría de los casos, por lo que no te olvides de comprobarlo justo antes de salir. 

Altura del sillín

Asegúrate de que la altura del sillín es la correcta (tanto si acabas de comprar una bici nueva o de segunda mano pregunta en tu tienda de ciclismo habitual) ya que no hay nada más incómodo que salir con una bicicleta cuyo sillín no está puesto a tu altura. 

Equipamiento

En este punto tenemos prácticamente todo listo para salir a rodar, solo nos faltaría asegurarnos de que contamos con un casco de nuestra talla. Además de esto, no es necesario que empieces con toda la equipación que lleva un ciclista profesional o incluso uno más avanzado, pero detalles como un culotte no solo harán la salida más cómoda, además evitarán o reducirán las molestias que puedas notar tras tu primera salida en bicicleta. Recuerda que si llevas culotte no será necesario que lleves ropa interior debajo ;)

Primeras salidas

Una de las claves en tus primeras salidas es recordar que debes rodar de forma relajada, tus manos, brazos, hombros y espalda deben ir en una posición cómoda y relajada para evitar cansancio extra o incluso molestias musculares.

Igual que cuando conduces un coche o una moto, recuerda mirar al frente y a lo lejos, en la dirección en la que vas, evitando así mirar hacia abajo o a tu rueda delantera. Recordar esto no solo evita posibles accidentes, además ayuda enormemente tanto en las curvas como en los descensos. 

En cuanto a la distancia y dificultad, elige rutas fáciles para empezar y a ser posible que tengan poco tráfico, de esta forma te aseguras de disfrutar al 100% de la experiencia de salir con tu bicicleta nueva.